Los sistema educativos adaptativos son una aplicación de la Inteligencia Artificial al ámbito de la Educación que busca ofrecer a los estudiantes una atención personalizada, automática y proactiva, en sus procesos de formación.
La investigación en esa área, con más de cincuenta años de desarrollo, ha identificado cuatro grandes áreas en las cuales es necesario desarrollar inteligencia:
- Inteligencia del objeto de estudio o área de conocimiento.
- Inteligencia de la pedagogía.
- Inteligencia del aprendizaje.
- Inteligencia de la interacción.
Los desarrollos correspondientes a cada una estas áreas ha llevado a lo que se podría llamar los cuatro componentes básicos de un sistema educativo adaptativo: modelo del dominio, modelo pedagógico, modelo del estudiante y modelo de la interfaz. Por modelo se entiende aquí un subsistema que integra una representación explícita del conocimiento y habilidades necesarios para generar comportamientos inteligentes en esa área; por ejemplo, un modelo del estudiante suele incluir una representación explícita del estado del desarrollo de las competencias del estudiante (conocimientos, habiildades y actitudes), así como de sus preferencias, necesidades de aprendizaje y otras características cognitivas o afectivas.
Las posibilidades de exploración en este campo de investigación son tan amplias, los desarrollos tan diversos y los problemas tan difíciles, que cada sistema adaptativo suele hacer énfasis en solamente uno de estos cuatro componentes, a los cuales podemos asociar sendas líneas de investigación y desarrollo:
- Modelo de dominio → sistemas de recomendación educativos.
- Modelo pedagógico → sistemas tutores inteligentes.
- Modelo del estudiante → entornos inteligentes de aprendizaje.
- Modelo de la interfaz → hipermedia adaptativa.

La separación entre las líneas es, sin embargo, bastante difusa, considerando la relevancia que tienen los cuatro componentes básicos de un sistema educativo adaptativo para hacerlo funcional.